El argentino metió dos goles en la victoria 3 a 1 por los octavos de final de la Champions League. Xavi marcó el restante. Shakhtar Donetsk dejó afuera a la Roma. El Barcelona dio otra muestra de su inigualable potencial futbolístico para sacarse de encima a un rival que estuvo cerca de dar la sorpresa pero no pudo resistir los constantes embates de Messi y compañía. Desde el minuto uno, el equipo de Pep Guardiola salió decidido a llevarse por delante a un Arsenal que presentó un planteo muy defensivo, algo poco habitual en los Gunners. Ese planteo complicó al Barça que no pudo encontrar espacios en la primera parte. Pero a los 48 minutos apareció su gran figura para empezar a torcer la historia. Tras un gran pase de Iniesta, Messi eludió con un sombrero al arquero Almunia y puso el 1 a 0. En el complemento, a través de una pelota quieta llegó el sacudón para los catalanes. A los ocho minutos, un centro de Nasri terminó con gol en contra de Sergio Busquets. Sin embargo, tres minutos después el árbitro suizo Massimo Busacca expulsó a Robin Van Persie, en una polémica decisión. A partir de allí, el Barcelona fue con todo a buscar el triunfo que lo depositara en cuartos de final. Fue así como a los 24 minutos, Xavi coronó una enorme acción individual de Iniesta, una de las grandes figuras de la noche catalana. Dos minutos después, Busacca pitó un claro penal contra Pedro. Messi lo convirtió en el 3-1 definitivo.
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