La antimateria sigue siendo un área misteriosa para la ciencia, y pese a que es muy difícil conseguir una antipartícula en la Tierra, ahora resulta que el planeta está rodeado de ella en un gran anillo de antiprotones. La antimateria se aniquila si entra en contacto con la materia, de modo que los antiprotones que se encontraron sólo sobreviven porque están atrapados en los campos magnéticos del planeta.
La existencia de antimateria alrededor de nuestro planeta era algo que los científicos suponían desde hace tiempo, pero que no había sido observado hasta ahora. El planeta es constantemente bombardeado por rayos cósmicos, que al chocar con la atmósfera crean antipartículas. Varias de ellas quedan atrapadas en una zona de radiación conocida como los cinturones de Van Allen, dos zonas circulares alrededor del planeta, donde las partículas giran haciendo espirales alrededor de los campos magnéticos de la Tierra...
Los satélites habían visto positrones (los anti-electrones) anteriormente en estos cinturones, pero hasta ahora no se habían detectado antiprotones, que son casi 2.000 veces más masivos. Las partículas más pesadas toman normalmente rutas más amplias al girar alrededor de las líneas magnéticas del planeta. Si las partículas estaban en campos magnéticos débiles, como los que están en la parte que da hacia afuera, los antiprotones darían una vuelta tan amplia que serían atraídos por la gravedad, y terminarían desapareciendo al chocar con materia normal en la atmósfera. Sin embargo, en el cinturón interior los campos magnéticos son lo suficientemente fuertes como para mantener atrapadas a las partículas.
El descubrimiento fue logrado gracias a PAMELA, una nave espacial de órbita baja lanzada en 2006, con la misión de buscar antiprotones en los rayos cósmicos. Una vez al día, PAMELA pasa por la Anomalía del Atlántico Sur, una parte de los cinturones de Van Allen que pasa muy cerca de la Tierra y que es una zona llena de partículas energéticas. Si había antiprotones en alguna parte, tenían que estar allí. Entre julio de 2006 y diciembre de 2008, PAMELA detectó 28 antiprotones atrapados haciendo órbitas espirales alrededor de los campos magnéticos que salen desde el polo sur de la Tierra. PAMELA puede hacer una muestra sólo de una pequeña parte del cinturón de Van Allen, pero los antiprotones probablemente están presentes en toda la zona. “Estamos hablando de miles de millones de partículas”, señaló Francesco Cafagna de la Universidad de Bari, Italia, uno de los científicos de la investigación. Se cree que los demás planetas deberían tener anillos de antiprotones similares a los de la Tierra.
0 comentarios:
Publicar un comentario