Los ladrones de metales no respetan ni temen a nada ni a nadie. El Panteón de las Fuerzas Armadas fue saqueado por desconocidos que cargaron con una estatua y una cruz de bronce, ambos objetos con un peso de media tonelada (mil libras).
Los ladrones sustrajeron, además, los soportes y las letras talladas en bronce del monumento ubicado en el Cementerio Nacional, ubicado en la avenida Máximo Gómez, en donde recientemente también fue saqueado el Panteón de la Policía Nacional.
Los organismos de las Fuerzas Armadas investigan si las piezas fueron robadas para venderlas a las compañías exportadoras de metales, razón por la cual han interrogado a varios empleados de empresas que compran y reciclan metales con fines de exportación.
La gigantesca estatua de más de 3 metros de altura fue diseñada y construida a principios de la década del 40, y estaba considerada como una obra de arte muy valiosa para las Fuerzas Armadas.
Los ladrones cargaron, además, con varias piezas en mármol y hierro que daban soporte a la estatua militar.
El Ministerio de las Fuerzas Armadas no ha podido precisar la fecha en que fue desmantelado el monumento histórico, el cual contaba con una discreta vigilancia de militares, según se informó.
Hasta el momento no hay personas detenidas en relación con el caso.
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