Barcelona y Manchester United definirán la competencia europea en Londres. Los de Alex Ferguson irán por la revancha tras la derrota en Roma en 2009. Los de Pep Guardiola buscarán revalidar aquella conquista. El nuevo campeón volverá a tener aroma latin. El sábado 28 de mayo, dos años después de la victoria "blaugrana" en el estadio Olímpico de la capital italiana por 2-0, los "Diablos Rojos" contarán con la gran posibilidad de vengar aquella frustrada derrota, que impidió alzar la cuarta "orejona" en la historia del club. Esa gran oportunidad llega en el mejor momento, ya que la mayoría de los futbolistas presentes en aquel encuentro, al igual que los entrenadores, volverán a enfrentarse dentro del campo. Tanto el Barcelona como el Manchester United son líderes en sus respectivas ligas a pocas fechas del final. Además, lograron acceder a la final de Europa tras un camino exitoso y con pocos sobresaltos. La contundencia en semifinales frente al Real Madrid y al Schalke 04 no ha sido obra de la casualidad. El estadio de Wembley albergará 90 mil espectadores en la sexta final de Champions que recibe en su historia, la primera desde su remodelación. La última definición que se jugó allí fue en 1992 y, curiosamente, el conjunto catalán superó a la Sampdoria por 1-0 para ganar su primera Copa de Europa. En este mismo escenario, los de Manchester también celebraron su primera consagración continental en la temporada 1967/68. Se enfrentaron 10 veces en torneos internacionales: ganaron tres veces cada uno y empataron cuatro. El último partido fue la final de la Champions de la temporada 2008/9. En dicha oportunidad, el Barça se impuso con goles de Samuel Eto'o y el argentino Lionel Messi, quien volverá a ser el gran atractivo en la final. Sus compatriotas Javier Mascherano y Gabriel Milito, al igual que el brasileño Dani Alves, serán sus acompañantes latinos en busca de una nueva conquista.
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