LeBron James se entrenó con el Heat de Miami después de que la víspera tuvo que salir de la cancha en el último período del cuarto partido de la final de la NBA porque sufría calambres en las piernas.
El jugador más valioso de la liga dijo sentirse mejor.
Piensa seguir bajo tratamiento hasta el quinto encuentro de la serie el jueves, cuando una victoria del Heat sobre el Thunder de Oklahoma City aseguraría el campeonato que James ha buscado durante nueve temporadas como profesional.
Con Miami 3-1 arriba en la serie a ganar cuatro de siete, James dijo que se mantiene concentrado en la tarea.
"Mi trabajo no ha terminado", afirmó.
Erik Spoelstra, el entrenador del Heat, informó que James entrenó sin dificultades.
Por su parte, el alero Kevin Durant del Thunder dijo que su equipo no se arredra al encontrarse contra las sogas en la serie.
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