Los controles ayudan a realizar tareas, manteniendo alejados a los operarios de las partículas radioactivas. Los robots miden la temperatura y la calidad del aire e identifican más de 7.500 sustancias químicas peligrosas. Para facilitar la maniobrabilidad y el control del robot sin poner en peligro la integridad física del operario, la compañía decidió que la máquina fuera manejada mediante los controles de la consola de Microsoft. Los robots, conocidos con el nombre de Talon, fueron enviados a Japón por la compañía QinetiQ North America, con sede en Virginia. Con el mando de Xbox 360, los trabajadores de Fukushima pueden ingresar a los centros nucleares. El aparato está equipado con cámara de visión nocturna y tiene la capacidad de identificar cerca de 7.500 tipos de amenaza, que incluyen químicos, gases volátiles, radiación y posibles explosivos, así como indicadores de calidad de aire y temperatura. Puede ser operado a una distancia de 1.000 metros.
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