Los chequeos manuales, arbitrarios y desconsiderados a que son sometidos viajeros por agentes de la DNCD) y del Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria (CESA), están provocando malestar y protestas en la terminal. También personas que se dirigen hacia naciones de Centro, Sudamérica y El Caribe, se quejan de que supuestamente estarían siendo víctimas de extorsión y chantaje por parte de agentes que prestan servicios en las máquinas de rayos X hacía de Migración de salida. Los miembros del CESA que prestan servicios en el área de acceso a Migración de salida, se resisten a utilizar los aparatos detectores de metales que poseen para chequear a las personas, que resultan sospechosas de llevar objetos prohibidos. Con frecuencia se producen choques verbales entre militares y viajeros, especialmente mujeres, que se niegan someterse a los chequeos manuales, exigiendo a los agentes a que utilicen los aparatos batones para la revisión física. Los agentes del CESA y de la DNCD, advierten en forma arbitraria a las personas que si se resisten a ser revisadas, procederán a detenerlos, originándose fuertes choques verbales.
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