Cory Moll es un treintañero empleado a tiempo parcial en una tienda de computadoras Apple en San Francisco (EE.UU.).
Moll se presenta como el artífice de la -por ahora- tentativa de crear un sindicato entre los trabajadores de la compañía.
"Hola, soy Cory y yo creé clic @AAPLRetailUnion porque estoy cansado de cómo la gerencia me trata a mí y a mis compañeros alrededor del mundo", escribió Moll en la red social Twitter.
Su postura es algo relativamente extraño en un lugar como Silicon Valley, sede californiana de los grandes del sector de la tecnología, donde el movimiento sindical es notoriamente débil.
Más en Apple, conocida en la opinión popular por la devoción que la mayoría de los cerca de 30.000 empleados profesan por su empresa.
"David contra Goliat"
"Es un sentimiento de David contra Goliat", dijo Moll, cuyo sueldo es de US$14 la hora. La empresa del archiconocido Steve Jobs es valorada en unos US$320.000 millones. Tanto es inusual la iniciativa, que Moll creó el sindicato de forma anónima en mayo y sólo recientemente ha hecho pública su identidad en un intento de recabar apoyos.
El joven, de 30 años, empezó su campaña a través de las redes sociales y con la creación de la página del clic "Apple Retail Workers Union", que se podría traducir como el Sindicato de trabajadores de los minoristas de Apple. Después de cuatro años trabajando para la empresa, quiere denunciar lo que califica de prácticas injustas en las tiendas de Apple.
"Nuestro momento llegó"
"Los asuntos centrales incluyen definitivamente las compensaciones, la paga y el resto de beneficios", reconoce Moll. El sitio en internet de la iniciativa de Moll es, por el momento, bastante escueto. "En Apple, nuestro recurso más importante, nuestra alma, es nuestra gente... Nuestro momento llegó", es prácticamente lo único que se puede leer.
Pero hasta ahora no ha recibido demasiado apoyo en público de otros empleados, aunque él asegura que sí que le han llegado correos electrónicos para mostrarle su apoyo. "Hay muchas dudas a la hora de hablar de ello. No creo que haya ni un 50% (de apoyo) en ninguna tienda, pero mientras se hable de esto podremos acercarnos en un par de tiendas", dijo Moll.
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