Nunca le he tenido mucha confianza a los cascos de poliestireno para los ciclistas. Se ven bonitos, quizás pueden llegar a tener algo de estilo y son bien aerodinámicos y ventilados, pero por seguridad siempre me ha generado dudas proteger mi cabeza con un poco de plumavit.
Similar inquietud tenía un estudiante de diseño llamado Anirudha Surabhi, que comprendió que no habían existido mejoras en este aspecto en las últimas décadas y que estaban mal enfocados los cascos actuales. ¿Su solución? Reemplazar la espuma plástica por un esqueleto de cartón corrugado inteligentemente elaborado.
Surabhi sostiene que no tiene sentido en seguir mejorando la aerodinámica y estilo, cuando el tránsito en una ciudad congestionada no es de alta velocidad y la seguridad ante eventuales colisiones o atropellos se hace primordial. Entonces creó el Kranium, un casco de cartón capaz de absorber cuatro veces la energía de impacto que su par de poliestireno y no se deteriora con la lluvia o el sudor, ya que está cubierto por un compuesto acrílico resistente al agua.
Además, el cartón puede ser cortado a pedido para que calce perfecto con la cabeza e incrementar aún más la seguridad. Luego se pone al interior de una carcasa con distintos diseños, para que no pierdas ese estilo que lucías en tu actual casco de juguete.
El diseño ya adquirió la licencia por parte de algunos importantes fabricantes, por lo que este proyecto pronto podría abrirse paso hacia las tiendas.
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