Nuevos derrumbes comienzan a registrase en varios tramos de la carretera turística Gregorio Luperón.Aunque desde el pasado lunes el Gobierno, a través de la empresa Ecocisa, inició los trabajos de mantenimiento de la vía, los residentes de la zona consideran que lo que hacen es pasarle “un paño con pasta”. En la comunidad de Palo Quemado, los deslizamientos de tierra dificultan el tránsito vehicular por el lugar. Sin embargo, dentro del programa de mantenimiento no se contempla corregir los puntos críticos, según informó el viceministro de Obras Públicas en la región Norte, Porfirio Brito. Aunque los deslizamientos de tierra en la carretera comenzaron en 2003 y provocaron el colapso de decenas de viviendas, fue a partir del 2009 cuando la vía comenzó a presentar hundimientos, que ponen en peligro la vida de los que por allí transitan.
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