La catástrofe japonesa afectó fuertemente a la compañía, generándole problemas operativos serios. Los cortes de suministro eléctrico y la paralización de la cadena de abastecimiento fueron determinantes. La cantidad de unidades vendidas también se desplomó un 23%, llegando hasta los 8,1 millones. El valor de las ventas totales descendió un 18,5 por ciento en comparación con 2010. El emprendimiento conjunto entre Sony y Ericsson, para la fabricación de teléfonos celulares y smartphones, se estableció en 2001. Desde entonces, ambas empresas renunciaron a fabricar dispositivos por su cuenta. Gracias a la sociedad, Sony pudo hacer pie en un mercado que le era esquivo. Combinaron los dispositivos japoneses con la tecnología de comunicaciones sueca. Dieron así lugar a teléfonos Walkman, centrados en la reproducción de música, Cybershot, focalizados en las capacidades fotográficas y Bravia, con la posibilidad de reproducir la Televisión Digital Terrestre en Japón. Sony había anunciado que estudiaba cerrar sus instalaciones en Japón durante dos semanas. Además comentó que ideaba estrategias de ahorro de energía para poder satisfacer las exigencias del gobierno.
0 comentarios:
Publicar un comentario