El fundador de Microsoft, Bill Gates, sostuvo el pasado lunes, en la carta anual de su fundación benéfica, que ninguna de las 35 naciones consideradas las más pobres por el Banco Mundial seguirá siéndolo dentro de 20 años. O, al menos, no lo serán como lo son ahora.
La Bill & Melinda Gates Foundation indicó, por otra parte, que todavía hay tres mitos que bloquean los progresos en la lucha contra la pobreza. Estos mitos, según Gates, son que los países pobres “están condenados a seguir siéndolo”, que las ayudas internacionales “son un desperdicio de dinero” y que “salvar vidas humanas contribuye a la superpoblación”.
Los países pobres “no están condenados a seguir siéndolo: los réditos y otros parámetros que miden el bienestar están en aumento en casi todas partes, incluso en Africa”, indicó el magnate.
Para Gates, la fotografía global de la pobreza fue completamente diseñada y se prevé que “para 2035 no habrá casi países pobres en el mundo”.
La fundación admite, sin embargo, que “habrá algunas naciones obstaculizadas por la guerra, la realidad política y la geografía”.
Con respecto al segundo mito, que señala que las ayudas internacionales “son un desperdicio”, el reporte de Gates apuntó que “eso es mentira”. “Una de las mayores lamentaciones sobre las ayudas externas es que van destinadas a la corrupción, pero no es así”, subrayó.
“Podemos reducir el dinero, pero no podemos eliminarlo”, agregó.
El tercer mito falso -salvar vidas deriva en superpoblación- “es totalmente lo opuesto”. “Dar vida a sociedades donde la gente pueda gozar de una salud básica, de igualdad y de acceso a los contraceptivos es el único camino a través de un mundo sustentable”, dijo.
“La convicción de que el mundo está empeorando y que no podemos resolver la pobreza extrema y las enfermedades no es sólo equivocada, es perjudicial”, escribió Gates.
“Pero el mundo es mejor de lo que fue jamás: dentro de dos décadas, será todavía mejor”, agregó.
“Las contribuciones a promover la salud y el desarrollo ofrecen amplios retornos. Hoy tenemos la posibilidad de crear un mundo donde la extrema pobreza sea la excepción y no la regla”, concluyó el informe leído por Gates.
