El presidente de la Unión de Farmacias, Julio Curiel de Moya, sugirió ayer al gobierno incluir en el programa de la tarjeta de Solidaridad, un capítulo para que los pobres también puedan comprar medicinas con el plástico. Entiende que con dicha disposición, los más necesitados de la República Dominicana tendrían medicinas seguras y de buena calidad. Al pronunciar el discurso central durante la entrega de premio "Mortero de Oro", Curiel de Moya resaltó que en el país conviven mas 150 suplidores de farmacias y unos 3,000 establecimientos que cubren todo el territorio nacional, ofreciendo así una cobertura envidiable a favor de los pacientes, sin importar el lugar donde se encuentra...
"Entonces, aunemos esfuerzos para preservar lo que no ha tocado hacer con tanto esfuerzo, tiempo y trabajo. Somos inmensamente pequeños para competir con los grandes del negocios, pero juntos podemos preservar el mercado", dijo. Curiel de Moya explicó que la Unión de Farmacias ha demostrado eficiencia de inventario, garantía de entrega, presencia segura de sus productos, mejor rentabilidad, lo que a su juicio puede definirse como un mecanismo que funciona.
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