En una ocasión, Arnold Schwarzenegger reveló las tres claves de su éxito: "Haber emigrado a Estados Unidos, ser elegido gobernador de California y estar casado con una Kennedy". Con respecto a la última se refería a María Shriver Kennedy, hija de la poderosa e influyente dinastía estadounidense con quien se casó hace 25 años, tuvo 4 hijos y quien fue crucial en la realización de las aspiraciones políticas de Schwarzenegger.
Ahora, el exculturista, exactor y exgobernador estaría muy pronto a ser exesposo de Shriver, después de que ambos emitieran un comunicado conjunto anunciando su separación. En el documento la pareja explica que ambos viven momentos de transición personal y profesional. "Tras muchos pensamientos, reflexiones, discusiones y oraciones, hemos tomado esta decisión juntos. Viviremos separados mientras decidimos el futuro de nuestra relación". Transición: Shriver, de 55 años, había abandonado hacía unas semanas la mansión de la pareja en un recluido cañón cerca de Los Ángeles y, desde hace un tiempo, los dos dejaban entrever que seguían rumbos independientes en los frecuentes comentarios que publicaban en las redes sociales. Tan pronto Schwarzenegger dejó el cargo de gobernador de California, se lanzó a viajar por el mundo para celebrar el cumpleaños de Mijáil Gorbachov en Londres, o a Washington para una conferencia sobre inmigración en la Casa Blanca, o a Francia para recibir la Legión de Honor.
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